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La noche del pasado [fecha] fue memorable en Miami, donde los Latin Grammys regresaron con todo su esplendor a la ciudad, marcando su primer retorno desde 2003.
El evento, celebrado en el Kaseya Center, reunió a las grandes estrellas de la música latina en una alfombra roja repleta de looks personalizados.
A lo largo de la noche, los nominados e invitados se tomaron el tiempo para ponerse al día, convirtiendo el ambiente en un encuentro más que en una simple entrega de premios.
La arena se transformó para crear un ambiente adecuado para lo que resultó ser una de las noches más emocionantes para la música latina.
El evento se sintió como una carta de amor a la industria de la música latina, con segmentos como el medley musical de apertura del ‘Personaje del Año 2024’, Carlos Vives.
Vives interpretó éxitos como ‘La Bicicleta’, ‘Robarte un Beso’, ‘La Tierra Del Olvido’, entre otros, acompañado de figuras como Juanes, Sebastián Yatra, Camilo, Kapo y Silvestre Dangond.
Uno de los momentos más esperados fue el tributo a la salsa, producido por el carismático salsero Marc Anthony, con la colaboración de Sergio George.
Este segmento reunió a un elenco estelar de leyendas de la salsa, que tocaron en un fondo representativo de la ciudad de Nueva York.
La India, Luis Figueroa, Grupo Niche y Tito Nieves unieron fuerzas para interpretar canciones como ‘Una Aventura’, ‘Tu Me Vuelves Loco’, ‘Llorarás’ y más.
Sin duda, este tipo de uniones solo son posibles en los Latin Grammys.
La sección ‘in-memoriam’ también se destacó, con presentaciones de Reik, Carlos Rivera, David Bisbal, Leonel García y Alejandro Fernández, quienes interpretaron canciones de los legendarios artistas mexicanos José José, Juan Gabriel y Vicente Fernández.
Sin embargo, los Latin Grammys intentaron también apelar al mercado anglosajón.
El famoso DJ Khaled hizo su aparición en el escenario junto a Eladio Carrión, Quevedo y Myke Towers, lo cual se sintió como un homenaje a la influencia del hip-hop en la música latina.
Otra curiosidad fue la versión del clásico de rock estadounidense ‘It’s My Life’ interpretado por Jon Bon Jovi y Pitbull, que resultó ser una actuación divertida a pesar de llegar algo tarde al fenómeno pop-rap de principios de los 2010.
En cuanto a los premios, la elección de los ganadores dejó a varios con un sabor agridulce.
El premio a ‘Mejor Álbum de Música Urbana’ debió haber ido para Álvaro Díaz.
La Academia no incluyó en las nominaciones a Tainy, lo cual sus aficionados consideraron como un error notable.
Tanto Díaz como Tainy ofrecieron algunos de los álbumes más destacados del pasado año, pero se optó por la seguro elección de Karol G.
Decisiones similares en otras categorías provocaron polémica entre los asistentes y fanáticos.
Si bien se entiende el impacto y la importancia de artistas como Jorge Drexler y Juan Luis Guerra, también es esencial dejar un espacio para reconocer a quienes están moldeando actualmente la industria musical.
Hubiera sido fabuloso reconocer a Anitta con el premio a ‘Grabación del Año’ por ‘Mil Veces’, un riesgo que valió la pena, propiciando que artistas mainstream comenzaran a explorar sonidos brasileños.
O tal vez debió ser para ‘Igual Que Un Ángel’ de Kali Uchis y Peso Pluma, que fue un éxito tanto con los críticos como en ventas.
En cambio, el galardón se otorgó a Guerra por ‘Mambo 23’, lo cual sorprendió a muchos.
El premio a ‘Álbum del Año’ fue igualmente controversial, con Guerra ganando a pesar de la ausencia de proyectos como el socialmente crítico, personal y político álbum de Residente.
Kany García y Carin León habían recibido premios anteriormente en la noche, pero también se sintieron pasados por alto.
El mensaje que se percibe es que, al igual que en los Grammys anglosajones, quizás sea necesario que la Academia Latina reevalúe si sus votantes realmente reflejan la industria musical contemporánea.
Después del evento, el compositor y productor Édgar Barrera compartió su opinión sobre los premios.
Al ser preguntado sobre cuál de sus 26 premios es el que más le enorgullece, Barrera lo tuvo claro: son el de ‘Mejor Compositor’ y ‘Mejor Productor’, ya que fueron los que ganó por su propio trabajo.
A pesar de que los actos preferidos por algunos no obtuvieron los galardones esperados, la 25ª edición de los Latin Grammys fue un espectáculo lleno de actuaciones inolvidables de muchos de los nombres más importantes de la industria.
Quedamos con la esperanza de que pronto la ceremonia regrese a Miami.